La difusión de la información representa uno de los principales desafíos de la transformación numérica empresarial. Considerada por mucho tiempo como una prioridad, dicha difusión se adapta a los nuevos modelos de gobernanza, tales como la empresa liberada. De hecho, los tradicionales esquemas de gobierno piramidal se encuentran en un proceso de declino, dándole paso a nuevos sistemas (organización personalizada, doble o celular…) Sin embargo, independientemente del modelo de gestión escogido, la clave del éxito reside (entre otras cosas) en la organización del proceso de transferencia de la información. Con la Web 2.0, nuevas herramientas permitan la difusión instantánea de noticias, al igual que comunicar en tiempo real las reacciones de los colaboradores de la empresa. Por ejemplo: las redes sociales en las empresas fomentan un enfoque participativo e inmediato.
Si desde la revolución industrial, los avances tecnológicos han permitido reducir la fatiga ligada a diferentes tareas para así propulsar las operaciones robotizadas, la revolución numérica permitirá una mayor comodidad en el trabajo. Consientes que el bienestar de los trabajadores (en el espacio laboral) es un factor de productividad y de desarrollo personal, varias empresas proponen diferentes herramientas que facilitan la vida de sus colaboradores y les garantizan más seguridad. Para seguir empleado un trabajador discapacitado o proporcionar la seguridad requerida por los empleados que ejercen en condiciones laborales extremas, la tecnología numérica propone las respuestas adecuadas.